


-
0





En la búsqueda de vivienda en Colombia, los hábitos de los consumidores han cambiado radicalmente. Actualmente, la mayoría de las personas inicia su proceso de compra o arriendo en línea, comparando precios, ubicaciones y características. La digitalización ha transformado la manera en que exploramos opciones, investigamos barrios, analizamos costos y evaluamos oportunidades de inversión. Sin embargo, aunque los canales digitales hacen que la información esté al alcance de todos, también representan un reto para las inmobiliarias: adaptarnos a las expectativas de los clientes, ofrecer información precisa y brindar un acompañamiento personalizado. En este escenario, nuestra labor como inmobiliaria no solo consiste en mostrar propiedades, sino en entender las necesidades de cada cliente y guiarlo de manera segura y confiable.

La nueva reforma tributaria que se discute en Colombia trae cambios significativos que podrían transformar la forma en que se compran, venden y arriendan los inmuebles en el país. Este proyecto busca aumentar el recaudo del Estado, hacer el sistema más progresivo y reducir la evasión, pero lo hace a través de medidas que impactan sectores clave como el inmobiliario. Entre las propuestas se encuentran ajustes a los impuestos sobre la renta por la venta de propiedades, modificaciones a los plazos para considerar una ganancia ocasional, y la posible aplicación del IVA a ciertos servicios asociados a los inmuebles.

El mercado inmobiliario en Colombia atraviesa un momento de transformación que refleja tanto los cambios en la economía como en los hábitos de quienes buscan, compran o arriendan vivienda. Factores como la inflación, la dinámica regional, la digitalización de la oferta y las nuevas preferencias de los hogares han configurado un panorama en constante evolución. Analizar estas tendencias permite entender cómo se está moviendo el sector y saber cuáles son las oportunidades que tienen los compradores, arrendatarios e inversionistas en distintas ciudades del país.

El Metro de Bogotá se perfila como uno de los proyectos más importantes de la capital. Este sistema de transporte no solo reducirá los tiempos de viaje, también impulsará el comercio, atraerá nuevos proyectos y elevará la valorización de los barrios conectados. Factores como accesibilidad, seguridad y practicidad pesan cada vez más en las decisiones de quienes buscan invertir en finca raíz. En Bogotá, ya se perciben estos cambios en sectores cercanos a la Línea 1, y todo indica que se intensificarán a medida que avanza la obra y se acerca el inicio de su operación comercial.